Luciérnagas y ovnis: el conocimiento fantasma

En una novela de Rebecca Maccai (Tengo unas preguntas para usted) se hace un uso ejemplar, por didáctico, de las luminosas luciérnagas, que están desapareciendo, por otro lado, de nuestras cansados ojos y nuestros no menos cansados cielos. Si no como especie, junto a los demás insectos, sí a causa de la luz cegadora de nuestras ciudades, que también nos impide ver las estrellas…

La cosa es que en esta historia de estudiantes, profesores y crímenes, en una reunión festiva, un alumno recién llegado irrumpe de pronto en el grupo avisando alarmado de que acaba de ver en el cielo una enorme cantidad de ovnis. Sus conmilitones, a pesar de su aparente escepticismo, bajan a la calle a mirar. Descubren entonces que los supuestos invasores del espacio no son sino luciérnagas, insectos cuyos machos iluminan los cuerpos en sus vistosas ceremonias de apareamiento.

Descubren también que el nuevo estudiante no sólo no solo no había visto nunca a estos insectos sino que ni siquiera sabía de su existencia. Los demás, alborozados por ser portadores de tal descubrimiento, cogen luciérnagas en los cuencos de sus manos para enseñárselas de cerca al novato… Como bien razona la autora, el chico había echado mano de su conocimiento y experiencia previa del mundo para explicar el fenómeno desconocido que acababa de presenciar: y lo que encontró más parecido fueron las luces de los platillos volantes. Que estos no formen parte de las que consideramos por consenso como verdades comprobables no importa; lo que importa es que le ayudó a explicar lo que veía…

Tanto los ovnis como las luciérnagas formaban parte, para este chico, de lo que Ortega y Gasset, en otro contexto, llamó una vez “conocimiento fantasma”. Es común a todos y todos lo usamos continuamente para cubrir los huecos de nuestro desconocimiento o ignorancia. En otras épocas eran mitos, en esta, quizá, memes o fake news.

Para acabar, invito al lector amigo a leer la edición bilingüe que publiqué en Sibila -mi canal en Substack- de un ensayo portentoso de Pier Paolo Pasolini sobre, justamente, la desaparición de las luciérnagas, o “Dopo la scomparsa delle lucciole” como suena en la hermosa lengua italiana…

La desaparición de las luciérnagas

Visitas: 28

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.